Las alzas de 2,5 cm están especialmente indicadas para poner en las botas, pero hay que tener en cuenta la medida del empeine de éstas, para ver si nos caben. Las alzas de 1,5 cm están pensadas tanto para bota como para zapato, pero tendremos en cuenta la altura de la trasera del zapato para ver si no nos expulsa el pie fuera del mismo.